La forma MADI
Una inquietud
El maestro Carmelo Arden Quin, inventor del movimiento Madi Internacional, expuso en la década de 1980, en una conferencia dada en la galería Ruth Ben Zacar, acerca del Arte Madi.
En esa oportunidad, alguien del público le planteó “una inquietud” , quería saber si era posible “graficar” la forma madi.
Amablemente tomó una hoja de papel rectangular y doblando uno de sus vértices en diagonal, como una pequeña oreja triangular, nos hizo ver, mas bien, nos reveló de que manera el espacio penetraba en la cuadratura de la hoja para transformarse en una forma poligonal.
Al parecer, síntesis y sencillez es la virtud de los maestros.
Una tradición
Los llamados artistas plásticos realizan sus obras sobre bastidores entelados, papeles, maderas, denominados soportes. Usualmente son rectangulares y cuadrados. Estas formas determinan claramente los límites y, sobre todo, el orden ortogonal de la obra a realizar.
Hay así una suerte de determinismo del espacio interno y un aislamiento del espacio exterior. Ese encuadramiento ofrece al espectador un marco, una “ventana” desde donde mirar la obra.
La obra así realizada representa: un tema, un sentimiento, una abstracción. El estado inicial es altamente ordenado,- el blanco original-, y un espacio homogéneo e invariable donde se producen cambios sucesivos operando con la línea, el color, las texturas, logrando los diferentes ordenamientos llamados composiciones. Se busca el equilibrio, a la manera de un péndulo mecánico.
Se crea la ilusión de continuidad, de movimiento, de profundidad, de volumen y el tiempo en este caso es, continuo y uniforme.
La uniformidad del tiempo, es una réplica de la inmutabilidad del espacio, mas allá de las variaciones formales con que es tratado.
La relación básica en el espacio es la yuxtaposición, la del tiempo, sucesión.
Pero si bien esto parece una formulación axiomática, por un momento admitamos que estas formulaciones siempre conceden la posibilidad de ser indecidibles.
Invitación
Tomemos una hoja de papel y sencillamente doblemos un vértice de la hoja hacia adentro. Aparentemente es una leve modificación. Un simple plegado en diagonal, en uno de los vértices de un cuadrado, o de un rectángulo, sin embargo hemos producido una transformación
Algunos llaman a esta transformación “incompletud”. La materia de un vértice del cuadrado o del rectángulo es reemplazada por el espacio dando origen a una forma poligonal que no se contradice con su forma original . Sencillamente manifiesta que hay otro orden, engendrado a partir de un orden dado. En realidad, lo que hemos hecho es romper ese orden dado. El orden cuadrangular de la “ventana”.
Donde había cuatro lados, ahora hay cinco, o mas según si seguimos operando.
Lógicamente el contenido del espacio interno se ve afectado. Ahora operan otras leyes. Donde antes había un cuadrado hicimos aparecer un polígono. De modo que en el espacio cuadrangular se produjo un desorden.
Es que el simple plegamiento aumentó la cantidad de información.
Y donde había materia, ahora hay vacío . Por supuesto se manifiesta una suerte de “desorden espacial”, referido al marco cuadrangular que nos aseguraba un estado altamente ordenado. Contenido.
En definitiva aquel pliegue, introduce un cambio. Otro orden. Es como si en cada pliegue, agitáramos mas y mas, la caja de un rompecabezas, originalmente un cuadrángulo perfectamente ordenado. Cuanto mas tiempo lo agitamos mayor es el desorden.
Surgen así, estructuras espacio temporales relacionadas con la ruptura de la ortogonalidad.
Estas nuevas relaciones entre lo interno y externo, son transformaciones que pueden ser continuas y progresivas. Y, si bien el grado de impredecibilidad es importante, esta nueva situación, (por lo menos, incierta), aumenta considerablemente el número de posibilidades combinatorias .
Dando lugar así a la invención de formas nuevas, la forma Madi.
Un Invento
El concepto de invención que introduce madi, vinculado al concepto de ludicidad es potencialmente significativo en el arte. Aparece por primera vez en 1945 en el único número de la histórica revista “Arturo”, en Buenos Aires .Invención en lugar de una metafísica de la creación
Este concepto nuevo, dio a luz nuevas ideas sobre la inteligencia que produce la obra, entendiendo por inteligencia, el grado de flexibilidad muy alto capaz de alcanzar el cerebro humano, me refiero a quienes usan la casi totalidad de los hemisferios. Predominado el cortex, madre de la invención, padre del pensamiento abstracto.
En este proceso, un orden genuinamente nuevo es traído a la vida.
La supervivencia de la obra depende entonces de dos niveles de armonía, dentro de espacio interno y las relaciones de ese espacio con el exterior. Actúa como un organismo vivo. De modo que nada será permanente, lo único que permanecerá será el cambio. Además, todas y cada una de las características del orden de cambio están, ellas también, en continuo cambio
Y algo mas, los cambios en el orden de cambio, establecen a su vez, nuevas características , lo que conduce, a la totalidad del proceso de la invención.
Pero,¿ que es lo que se inventa?
Un Objeto
Esta operación de concretizar el movimiento, produce el nacimiento de un objeto, cuya concepto de belleza es dinámico, dado que no representa, no expresa, no significa. Sencillamente hay un ritmo, poético si se quiere, que no se define por la cantidad de elementos, sino por el ritmo de lo propio del invento, como algo vivo, con una respiración.
El objeto así inventado, se convierte en una unidad óptica en movimiento En una comunicación entre los elementos de la obra y el espacio exterior.
Las apreciaciones visuales descubren la realidad del espacio. Las táctiles la realidad de la materia. El movimiento es descubierto por una cenestésica visual.
Una Poética
Todo comenzó, a mediados del siglo pasado, a ambas orillas del Río de la Plata, donde se “inventó” el Madi, acaso el único movimiento artístico con tal sello de originalidad, que muy poco le debe al arte europeo.
Ese invento nació de una forma de pensar diferente, sintetizado en esa leve modificación de aquel cuadrado (cuadro) inicial, a quien “le cortaron una oreja”, estableciendo así nuevas leyes del objeto.
Ahora el espacio se dinamiza, (o tal vez, el tiempo se espacializa).
Hay una fusión espacio tiempo. Parecería ser que entramos en otra dimensión.
Recordemos que, esa modificación de la forma, ese recorte rompe la ortogonalidad, provoca un cambio de orden.
¿Cual, es, a la sazón el programa operativo que propone el artista?
Quiero decir: ¿cual será entonces la poética de la obra?.
Porque este nuevo orden constituye el dominio por excelencia de la multiplicidad de soluciones. Ante esto el artista elige alguna.
Ahora el vacío es constructor de las formas resultantes estableciendo una relación plástica nueva entre el espacio interior y el exterior.
El espacio , inventado por la forma madi no es pasivo. Lo mismo que el silencio .Ya no es aquello que contiene las cosas, sino que ,en constante movimiento, altera su transcurrir e interviene activamente en sus transformaciones.
Es el agente de las mutaciones. El espacio que libera la forma madi es energía.
El vacío parece una entidad diáfana en contraste con la materia tangible. De igual modo, la materia y el espacio en virtud de su constancia parecen ser menos evasivas que el movimiento.
Mas,¿ que sucede cuando el espacio se introduce en la materia, como en el caso madi?
O mejor , el vacío ocupando el espacio hasta un momento lleno
¿Se introduce el silencio con el vacío. Cual es la forma del silencio entonces?
Un Ritmo
El espacio se mueve, se incorpora a la obra y determina otros órdenes, otros ritmos.
La forma madi, no contiene la obra, tiende a ser obra
Y contenido, y forma como unidad en un ritmo, acaso musical, entre el adentro y el afuera en correspondencia visual con el movimiento de las formas y las respiraciones interiores de los elementos.
La forma madi es un movimiento que alude al ritmo de la obra .
Propicia que el espacio penetrante se vuelva obra. Espaciosos silencios que dialogan con los simples elementos de la geometría.
Formas planas monocromas, en blanco y negro y los complementarios, formas curvas superficies onduladas , relieves, superficies atravesadas, la multilateralidad, lo cóncavo y convexo, son elementos de un lenguaje nuevo, que a la manera de un poema inventa un objeto, que es en si mismo.
Madi abre las puertas a un espacio cambiante, dinámico, de modo que el conjunto de elementos que componen la obra completan su significado con el movimiento del espacio, ahora activo.
Una inquietud
Por lo general el concepto de materia oscurece, a veces, el concepto de vacío, y ambos conceptos oscurecen el de movimiento, y, casi siempre los conceptos de espacio, materia y movimiento oscurecen el de tiempo.
Cuestiones táctiles, o psicológicas, tal vez. Pero podríamos preguntarnos
¿a que dato visual corresponde la realidad del tiempo.?
Sobre todo cuando al volver a ver obras hechas a mediados del siglo XX, por los maestros madi, mantienen su vitalidad y vigencia. Acaso, comprendieron como nadie que el artista, está inmerso en la evolución biológica pero también sumergido en un universo en evolución.
Esta invención de los madi, en el siglo pasado, de proponer una salida a la concepción estática del espacio hacia la dinámica de mismo, quizá se acerque, me atrevo a pensar, al menos en su génesis, al esfuerzo de la ciencia por tender un puente entre el universo gravitacional y el termodinámico, lo que implica una drástica revisión del concepto de tiempo, donde hoy, el tiempo, ya no es un parámetro del movimiento sino que mide evoluciones internas hacia un mundo de no equilibrio.
Si me lo permiten, dejo entonces una inquietud.
como se inscribe el tiempo en la obra madi?
Pepe Cáceres. Córdoba 2008-
Ponencia expuesta en el Congreso de Geometría Cabrí. Universidad de Córdoba.- Museo de Bellas Artes EmilioCcaraffa